Capitulo 13

Capitulo 13

Todo es borroso, y no logro enfocar mi visión. Lo único que recuerdo es la textura de las grandes manos de Gale envueltas en mí, las alarmas y los gritos. Mi temor más grande es que haya vuelto a esa estúpida celda, o que hayan hecho algo malo a mi familia o a Gale.

Una luz juega en mi cara, y me doy cuenta de que es una lámpara. Noto rostros detrás de la misma. Las personas que me estaban atendiendo, se van. No sé lo que debo hacer. Levantarme e irme o quedarme y esperar.

Busco a Gales por todas partes, pero no lo encuentro, decido levantarme y buscarlo. En lugar de encontrarlo a él me encuentro con Haymitch, estoy enfadada con él, pero debo encontrar a Gale.

-¿Has visto a…?

-Sí, te está esperando al final del pasillo.

Corro pero en lugar de encontrarme con la codiciosa cara de mi mejor amigo y amante, me encuentro con las manos que lo golpearon, las mismas que me lanzaban lejos y no me dejaban ayudarlo. La misma boca que soltaba malas palabras hacia mí y Gale.

Sin pensarlo dos veces me lanzo sobre él y comienzo a golpearlo, los dos caemos al piso y comenzamos a rodar, sigo golpeándolo, hasta que siento dos manos sobre mí. Estas me toman y me cargan, sacudo mis piernas en busca del piso, pero debajo de mi solo hay aire. Siento que me falta el aire, intento tomarlo, pero hay algo que me lo evita, se me nubla la vista e inmediatamente solo veo oscuridad.

Despierto en una habitación blanca, de inmediato veo imágenes de Gale siendo golpeado y débil, y un gigantesco Peeta, feliz por verlo así. Intento cerrar los ojos y recordar lo que ha pasado, pero nada viene a mi mente. Me la paso horas intentando recordar, pero nada viene a mi mente.

Escucho voces, pero no encuentro ni una puerta por donde salir, había pensado tanto que no me había dado cuenta de que estoy atada. Cierro los ojos al notar que se abre un orificio en el techo y luego cae una escalera. Veo la cara de dos personas, no puedo creer que sigan vivas pero están frente a mí, recuerdo lo que ha pasado con Cinna, lo que habían hecho para que todos pensaran que estaba vivo. Intento desatarme, pero termino abriendo mis muñecas con el roce de las cintas. Primm se acerca a mí y me dedica una pequeña sonrisa, pero no sé si en realidad sea ella. Mi madre se encuentra detrás de Primm, ambas se acercan más y siento como me desatan. In mediatamente me aparto. Pero sé que solo hay una cosa que Primm y mi madre saben, y aunque Peeta lo sepa, él no sabe la verdadera historia.

-Cuéntame ¿Cómo es que he conseguido tu cabra?

Primm cuenta toda la historia, y no es la que recite en los juegos. Las lágrimas inundan mis ojos y comienzan a deslizarse por mis mejillas. Noto que Primm y mi madre también lloran, nos damos un gran abrazo y noto que detrás de ellas esta Gale, me separo de ellas y me acerco a él, lo abrazo, pero antes de que pueda darle un beso, sujeta mis hombros.

-Catnip, nesecito saber una cosa antes de seguir adelante con esto.

Me invade la sensación de preocupación y miedo, por cualquier cosa que me quiera decir.

-¿Es verdad lo que me dijiste la última vez que nos vimos?

“Te amo” le había dicho antes de nuestro gran beso. Una pequeña sonrisa intenta invadir mi cara, y la dejo hacerlo.

-Cada palabra.

Una luz cobra vida en sus ojos y me sujeta la cintura con un poco de timidez. Intento facilitarle las cosas y me acerco más a él. Nuestros cuerpos se unen en un beso. Las mariposas que creí nunca sentiría, aparecen en mi estomago, haciendo la sensación del beso mas cálida, los labios de Gale saben a menta, y su olor me recuerda a un gran bosque del doce por la mañana, la mañana perfecta para salir a cazar.

Al separarnos noto que me había levantado del suelo durante el beso, volteo a ver a Primm y a mi madre y noto que las dos están sonrojadas e intentan no vernos.

-Lo sentimos- Decimos los dos al mismo tiempo, mi madre nos dedica una mirada de enojo, pero con una gran sonrisa, lo que me hace notar que no lo dice seriamente. Por otro lado Primm solo esboza una pequeña sonrisa.

Recuerdo lo que he intentando recordar por tanto tiempo y pregunto:

-¿Qué lugar es este?

Noto que los tres intercambian miradas y finalmente Gale dice:

-Estamos en un hospital

-¿Por qué estamos aquí?

-Recuerda que la última vez que nos encontramos te heriste.

La única palabra que sale de mi boca es “Oh”.

Un pequeño tintineo recorre la habitación, Gale dice:

-Es hora

Noto que los tres comienzan a subir por las escaleras, avanzo hacia ellos y sujeto a Gale por su brazo.

-Por favor, no me dejes.

El no voltea a verme solo sigue caminado, la puerta se cierra por encima de mi, ¿Qué habre hecho mal? ¿Por qué se ha ido de esa manera?, mis pensamientos son interrumpidos por el sonido de la puerta abriéndose, noto que bajando por ella viene Gale, pero no tengo idea de que hacer, el tiene una mochila y varias mantas. El las coloca en el piso y me hace una seña para que me acerque. Lo hago, y me abraza.

-No podía dejarte.

Me da un besito en la frente, y saca de la mochila, mi platillo preferido del capitolio, en latas. Y una botella que contiene zumo de naranjas.

-Fue difícil, pero finalmente las conseguí.

-Gracias- Le dedico una sonrisita y le doy un besito en la nariz. Cuando terminamos de comer, simplemente nos la pasamos juntos toda la noche, abrazándonos o besándonos o simplemente acostados sobre las mantas.

Pero lo único en lo que puedo pensar es en lo feliz que me siento en este momento.